Los aceites esenciales y su potencial contra el cáncer

Aunque la investigación en la aplicación de Aceites Esenciales como agentes terapéuticos anti cáncer es relativamente nuevo, es conveniente aclarar que en las investigaciones ya iniciadas por diferentes organismos en materia de salud han demostrado que aproximadamente la mitad de los agentes anticancerígenos que se encuentran en la quimioterapia provienen de las plantas, el 25% derivados directamente de ellas y el otro 25% son versiones químicamente modificadas de fito productos.

Como dato importante una de las moléculas químicas presente en la quimioterapia es ‘baclitaxel’ (mejor conocido en su nombre comercial como Taxol) es un derivado de la corteza del Árbol del Tejo (Taxus brevifolia) una conífera nativa del noroeste del pacífico en Norteamérica.

¿Qué es el Cáncer?

Un crecimiento anormal de células que tienden a proliferar de forma descontrolada y, en algunos casos, a diseminarse o esparcirse por el organismo.

El cáncer puede involucrar cualquier tejido del cuerpo y tener muchas formas diferentes en cada área. La mayoría de los cánceres se nombran por el tipo de célula u órgano en el que se inician. Si un cáncer se propaga (hace metástasis), el nuevo tumor lleva el mismo nombre que el tumor original.

En general el cáncer se divide en 3 etapas:

  1. Iniciación: En el cual, el daño al ADN celular (Ácido Desoxirribonucleico, información genética) y la mutación ocurren por la exposición a carcinógenos debido al fallo en los mecanismos de reparación del ADN.
  2. Promoción: En el que se produce hiperproliferación (reproducción y multiplicación muy rápida y alta a nivel celular) remodelación de tejidos e inflamación debido a la expansión de células.
  3. Progresión: Las células forman tumores debido al aumento de la inestabilidad e información genética alterada.

 

En las últimas décadas el Cáncer se ha levantado como una de las enfermedades más alarmantes en todo el mundo. Es una enfermedad multifactorial en la cual se presenta un crecimiento incontrolado y una invasión de células anormales que llevan a formar un tumor. Una de las principales razones por la cual, hoy en día, se han incrementado los casos de cáncer es atribuido a los hábitos alimenticios, la ingesta de alcohol y tabaco, infecciones crónicas, exposición continua a químicos y radiaciones nocivas para el organismo, el constante estrés en el que vivimos y la contaminación ambiental.

Acorde a estudios realizados por El Centro Internacional de Investigaciones sobre el Cáncer​ un órgano intergubernamental que forma parte de la Organización Mundial de la Salud de las Naciones Unidas, en los últimos años hay más de 15 millones de nuevos casos de cáncer alrededor del mundo y casi 10 millones de muertes ocasionadas por esta enfermedad. El Cáncer es la principal causa de muerte y se espera que se incremente en un 70% en las siguientes dos décadas.

Cáncer de pulmón, hígado, estómago, colon, mama, próstata, son los principales tipos de la enfermedad que están ocasionando millones de decesos; estas estadísticas apoyan y promueven la necesidad de una nueva droga como quimioterapia en los años que están por venir.

El problema es más serio en los países económicamente menos desarrollados por las escasas técnicas de diagnóstico, métodos estándar de tratamientos y su alto costo. Las personas dedicadas al campo científico están superando estos problemas con el uso de drogas sintéticas, las cuales son diseñadas para atacar rápidamente el crecimiento y división celular en tumores, pero estas drogas sintéticas también afectan la división normal de células sanas en nuestro cuerpo dejando importantes e irreversibles efectos secundarios.

La quimioterapia usada en el tratamiento contra el cáncer ha reportado una resistencia multidrogas en los pacientes, además de su alto costo y los efectos secundarios, los enfoques terapéuticos actuales están obligando a la ciencia a explorar LAS MEDICINAS ALTERNATIVAS, LA MEDICINA TRADICIONAL, como una opción para encontrar nuevas entidades químicas para el tratamiento del cáncer.

Los Aceites Esenciales como agentes anticancerígenos

Explorando los productos derivados de las plantas naturales como opción para encontrar nuevas entidades químicas anti cáncer es una de las áreas de investigación con crecimiento más acelerado. En esta década, los aceites esenciales han estado bajo estudio por su uso para la terapia contra el cáncer.

Los aceites esenciales son extractos oleosos y altamente concentrados derivados de las plantas, contienen vitaminas, hormonas, antibióticos, antisépticos y una serie de compuestos bioquímicos con profunda acción terapéutica; tienen efectos como medicamentos convencionales, así como también llevan a un bienestar psicológico y espiritual. Son la forma más poderosa de energía herbaria. se clasifican ampliamente en compuestos oxigenados e hidrocarburos. Los compuestos oxigenados incluyen ésteres, aldehídos, cetonas, alcoholes, fenoles y óxidos. Los compuestos de hidrocarburos están compuestos por un grupo químico específico llamado terpenos, monoterpenos, sesquiterpenos; químicamente, los aceites esenciales tienen varias funciones:

  • Defensa contra herbívoros, insectos y microorganismos
  • Comunicación con plantas de la misma especie y señalización dentro de la planta en respuesta a estímulos ambientales.
  • Cada especie o subespecie de plantas ha evolucionado para protegerse de un depredador o grupo de depredadores en particular, cada planta produce su propia mezcla específica de componentes químicos de aceites esenciales.

Sus componentes se utilizan por sus aromas específicos en perfumería y como agentes aromatizantes en productos alimenticios desde la antigüedad. Los aceites esenciales también se han utilizado en la aromaterapia para mejorar la salud debido a las propiedades sedantes y estimulantes, al masaje, al baño y a la inhalación como relajantes y al tratamiento como aromaterapia para diversas enfermedades con ingredientes activos que se aprovechan en la medicina. Su naturaleza les permite cruzar fácilmente las membranas de las células y llegar hasta su interior, se describen como fuertes antioxidantes y antimicrobianos y se utilizan para el tratamiento de enfermedades graves como las cardiovasculares, diabetes, alzhéimer, cáncer y otros.

El Centro Internacional para la Investigación Biotecnológica, Instituto Nacional de la Salud en Estados Unidos e Instituto Nacional del Cáncer (NIH) cuentan con más de 130 estudios e investigaciones sobre los Aceites Esenciales provenientes de diferentes especies de plantas y sus componentes han sido objeto de estudio más allá de su potencial anticancerígeno para cáncer de  boca, seno, pulmón, próstata, hígado, colon, cerebro y leucemia, algunos de sus componentes como el Carvacrol, (aceite esencial de Orégano), limoneno (aceite esencial de Limón), geraniol, (aceite esencial de Geranio), cariofileno, (aceite esencial de Copaiba) timol,(aceite esencial de Tomillo) citral, (aceite esencial de Hierbalimón) entre otros han sido también reportados de poseer efectos citotóxicos (sustancia que impide que las células se multipliquen) sobre las células cancerígenas.

¿Cómo actúan los Aceites Esenciales para prevenir y combatir el Cáncer?

Los fármacos utilizados en el tratamiento del cáncer se dirigen a la célula cancerosa mediante la inducción de Apoptosis (destrucción celular) o la Detención del Ciclo Celular. Por lo tanto, los productos naturales que causan la apoptosis en las células cancerosas son recursos valiosos para la supresión del cáncer.

Las Aceites Esenciales con potencial terapéutico pueden actuar de dos maneras; mediante la quimioprevención y la supresión del cáncer. Varios mecanismos involucrados en el tratamiento del cáncer son: Inducción a la Apoptosis, Incremento en las Especies Reactivas del Oxígeno (ERO), Detención del Ciclo Celular, la Antimetástasis y la Antiangiogénesis, la Activación de Enzimas de Desintoxicación, la Modulación de la Señalización de Reparación del ADN. La actividad antiproliferativa (que impide la multiplicación acelerada de las células malignas) demostrada por los aceites esenciales en las células cancerosas hace que se conviertan en agentes anticancerígenos adecuados que no muestran grandes efectos aparentes en las células normales.

 

Inducción a la Apoptosis.

 

Apoptosis es la destrucción o muerte celular programada o provocada por el mismo organismo con el fin de controlar su desarrollo y crecimiento.

Puede ocurrir debido al efecto de material genético y otros eventos celulares como cambios en las proteínas a nivel intracelular. Un estudio en células de melanoma humano informó que el tratamiento de aceites esenciales induce daño en el ADN de las células cancerosas, que es un indicador de apoptosis. Además del daño en el ADN, la modificación de varios genes por la acción de los aceites esenciales también es responsable de la apoptosis. Boswellia (aceite esencial de Incienso) contiene información bio química involucrada en la apoptosis, al igual que la Salvia (aceite esencial de Salvia) tiene compuestos como el acetato de linalilo que son muy efectivos contra el cáncer.

 

Incremento en los niveles de Especies Reactivas del Oxígeno (ERO)

 

Durante el metabolismo fisiológico de todos los seres vivos se producen reacciones bioquímicas con producción de radicales libres, son procesos que si no son controlados pueden poner en peligro la integridad celular.

Los radicales libres, como las toxinas, los químicos y los contaminantes, son posiblemente el factor de riesgo más peligroso y más común para todas las enfermedades que afectan actualmente a gran parte de la población mundial. Los radicales libres son responsables de apagar el sistema inmunológico pues es el primero que se ve afectado rápidamente, desencadenando varios tipos de enfermedades que pueden causar un daño increíble al cuerpo.

El conjunto de radicales libres que producen daños oxidativos a nivel celular se les llama Especies Reactivas del Oxígeno. Estas especies se forman de manera natural como subproducto del metabolismo normal del oxígeno y tienen un importante papel en el funcionamiento celular, cuando se vive bajo mucho estrés, sus niveles pueden aumentar, lo cual lleva a generar daños significativos a las estructuras celulares (estrés oxidativo).

La correcta modulación de estos radicales libres por parte de los antioxidantes reduce drásticamente la aparición de enfermedades ya que colaboran en mantener o restablecer el equilibrio que proporcionará una mejora en la salud, protegiendo el sistema inmunológico y favoreciendo el buen funcionamiento del organismo.

Dicha respuesta en la célula cancerosa en el tratamiento con aceites esenciales se ha observado como un método de tratamiento eficaz.

El aceite esencial de Lavanda (Lavandula Angustifolia) se caracteriza por su poder antioxidante,

la respuesta natural del cuerpo al daño de los radicales libres es crear enzimas antioxidantes, especialmente glutatión, catalasa y superóxido dismutasa (SOD), que evitan que estos radicales libres hagan daño.  Es un antioxidante natural que actúa para prevenir y revertir las enfermedades. Un estudio del año 2013 publicado en Phytomedicine encontró que el aceite esencial de Lavanda aumentaba la actividad de los antioxidantes más poderosos del cuerpo: el glutatión, la catalasa y la SOD (superóxido dismutasa) y ayuda a prevenir o revertir el estrés oxidativo.

 

Detención del Ciclo Celular

 

El correcto funcionamiento del ciclo celular se pierde debido a la falta de respuesta en los reguladores de dicho ciclo en las células cancerosas, lo que lleva a una división y multiplicación celular descontrolada. La regularización de los genes involucrados en este proceso también se ve obstaculizada; por lo tanto, detener cualquier evento del ciclo celular en la célula cancerosa conduce a la prevención de su crecimiento y división, una estrategia terapéutica ampliamente empleada.

Varios componentes de los aceites esenciales como el geraniol, (aceite esencial de Geranio) el timol, (aceite esencial de Tomillo) y el carvacrol (aceite esencial de Orégano) inhiben diferentes fases del ciclo celular alterando su expresión lo que ocasiona la detención del ciclo celular y por ende se detiene la división y multiplicación de células cancerígenas, otro de los componentes al alza en este proceso es la boswellia contenido en el aceite esencial de Incienso. Por lo tanto, los aceites esenciales y sus componentes sirven como sustancias anticancerígenas efectivas al frenar la progresión del ciclo celular en las células cancerosas.

 

Antimetastásicos y Antiangiogénicos

 

La angiogénesis es la creación de vasos sanguíneos a partir de los ya existentes alrededor los tumores, los cuales les ayuda a sobrevivir y proliferar. La inhibición de este proceso detiene el suministro de nutrientes a la célula cancerosa y es una forma eficaz de controlar el padecimiento.

El aceite esencial de Naranja (citrus sinensis) ha mostrado efectos antiangiogénicos al igual que actividad antiproliferativa contra varias líneas celulares de cáncer además de inhibir el crecimiento del melanoma y la metástasis en las células cancerosas.

La inhibición del factor de crecimiento vascular que juega un papel importante en la angiogénesis es el indicador clave del comportamiento antiangiogénico. La eficacia de los aceites esenciales para inhibir estos procesos permitirá posibles estrategias de tratamiento para la terapia del cáncer.

 

Efecto sobre las enzimas de desintoxicación

 

Genotoxina: Toxina que afecta el material genético.

Las genotoxinas conducen a la alteración de los antioxidantes internos y enzimas antioxidantes como la superóxido dismutasa, catalasa, glutatión peroxidasa y glutatión reductasa con la alteración de varias funciones importantes del cuerpo que causan daños en los tejidos y membranas. Ciertos compuestos de los aceites esenciales actúan como inductores de estas enzimas de desintoxicación y, por lo tanto, evitan la toxicidad inducida e incluso el cáncer en los modelos de líneas celulares.

 

Modulación y reparación de danos en el ADN por Aceites Esenciales

 

Citotóxico: Sustancia que elimina células e impiden que células cancerígenas se dividan, crezcan y contribuyen a disminuir el tamaño de tumores.

El aumento en la producción de Especies Reactivas del Oxígeno (ERO) provoca daños en el ADN y puede conducir a la muerte celular. Los aceites esenciales tienen el potencial de inducir a las células cancerosas hacia la muerte celular preservando y activando la proliferación de células sanas y normales. Esta actividad especialmente dañina en las células cancerosas proporciona una ventaja añadida al usar aceites esenciales.

Algunos de los componentes de los aceites esenciales son citotóxicos, es decir, contienen sustancias que eliminan células, especialmente aquellas que son cancerígenas además de estimular la proliferación de células normales. El potencial de reparación del ADN está presente en varios aceites esenciales y sus componentes, las células tratadas previamente con compuestos como linalol (aceite esencial de Geranio) y eucaliptol (aceite esencial de Eucalipto) se estudiaron determinando que promueven la actividad reparadora del ADN mediante su recuperación en medios normales y se encontró que pueden reducir el daño potencial causado por el hidróxido de peróxido una genotoxina (toxina que afecta el ADN).

Por lo tanto, los aceites esenciales inhiben la progresión de las células cancerosas y muestran propiedades anticancerígenas a nivel de reparación del ADN se pueden usar como agentes quimioterapéuticos en el tratamiento contra el cáncer.

 

Resistencia multidroga

 

La resistencia a múltiples fármacos es el problema más frecuente en los pacientes con cáncer, lo que hace que la mayoría de los fármacos anticancerosos de uso habitual sean ineficaces. Muchas de las investigaciones están orientadas a sortear este problema; esto se debe a diferentes mecanismos, como la inducción de la reparación del ADN dañado en respuesta al fármaco, el cambio en la capacidad de captación del fármaco y el cambio en el nivel y la respuesta de las enzimas seleccionadas. Los aceites esenciales de Tomillo y Árbol de té son efectivos contra los fármacos ampliamente utilizados y pueden mejorar la resistencia a la Adriamicina (La doxorrubicina o hidroxildaunorrubicina, nombre comercial de la Adriamicina, es un fármaco ampliamente utilizado en la quimioterapia del cáncer) en células de melanoma; además, también se observó una reducción del tamaño del tumor en estudios in vivo (estudios en pacientes que padecen cáncer), lo que indica la eficacia del sistema de aceites esenciales en mamíferos.

El uso de los aceites esenciales como suplementos dietéticos puede mejorar la respuesta al tratamiento. Sin embargo, aunque no son muchos los estudios disponibles en este aspecto, los aceites esenciales y sus componentes activos son las vías prometedoras para combatir la resistencia a múltiples fármacos en pacientes con cáncer ya que se pueden utilizar como terapia complementaria debido a sus efectos beneficiosos sobre la capacidad que tienen de superar la resistencia a múltiples fármacos.

 

Los Aceites esenciales como prevención a los efectos secundarios en el tratamiento contra el Cáncer.

 

Los pacientes con cáncer sufren diferentes efectos secundarios que pueden reducirse preferentemente con métodos alternativos. Los aceites esenciales se usan en la aromaterapia para reducir la agonía de los pacientes con cáncer cerebral, de igual manera son eficaces en la depresión y la reducción de la ansiedad en personas que padecen la enfermedad y que son sometidos a quimioterapia y son propensos a diversos efectos secundarios como náuseas y vómitos. Se ha encontrado que la Mentha Spicata (aceite esencial de Hierbabuena) y Mentha Piperita (aceite esencial de Menta) son eficaces para superar estas condiciones.

Se informó también que aquellos que sufrían mal olor y dolor tenían mejoría en su estado con el tratamiento de las úlceras con la mezcla de aceites esenciales que contienen Eucalipto, Árbol de té, Hierbalimón, Limón, Clavo y Tomillo. El aceite esencial de Lavanda se usa ampliamente en la aromaterapia y es beneficioso para reducir la angustia en los pacientes con cáncer. Por lo tanto, sirven como preparaciones valiosas para mejorar los efectos secundarios y sufrimiento de los pacientes con cáncer.

Una perspectiva hacia el futuro…

Los aceites esenciales se han usado en medicina desde la antigüedad y el presente artículo es un intento de resaltar su valor terapéutico y quimiopreventivo. Los componentes bioquímicos de los aceites esenciales son potentes en la prevención y el tratamiento del cáncer. Nuevas moléculas anticancerígenas están presentes en ellos y se pueden explotar aún más en la acción terapéutica. Sus compuestos pueden evaluarse como agentes terapéuticos para combatir esta terrible enfermedad y aunque se encuentran todavía en fase de investigación y crecimiento es necesario explorar su inmenso potencial ya que pueden utilizarse en combinación con estrategias quimioterapéuticas convencionales.

 

 

Bibliografía:

www.cancer.gov/cancer/tratamiento/mca/paciente/aroamterapia

www.ncbi.nlm.nih.gov

www.hindawi.com

www.cancertutor.com